Paulino Romano Caneiro (Llanes, 1943) estuvo 35 años en el Banco Herrero. Entró de cobrador de letras y se jubiló como subdirector de la sucursal. Esi local estaba y está frente al Ayuntamientu, en lo que fue el glamurosu Café Zahara, qu' estuvo abiertu en los años 30 del siglu XX. En plena Guerra Civil, durante la cual el Zahara siguió funcionando, se veía alguna vez por allí al Coritu (Manuel Sánchez Noriega), unu de los guerreros republicanos más legendarios, habitualmente embucháu en un abrigu de cueru y tocáu con un sombreru tejanu o parecidu.
Jiyu únicu de Paulino Romano, de Llanes, carpinteru que trabajó muchu pa Celedonio Torre, y de Enriqueta Caneiro, de Narganes (Peñamellera Baja), que había venidu de moza a servir, nuestru Paulino estudió en las Escuelas Cristianas de La Arquera hasta los 14 años. A esa edá empezó a trabajar de mecánicu con Balín (José María Galguera) en el taller concesionariu de Vespa, qu' estaba onde está ahora Contró. (Lambretta, la otra marca italiana de vehículos de dos ruedas, estaba representada por el Moli, otru mecánicu ilustre, en el Cotiellu).
Después d' aquello, Paulino entró en Dragados y Construcciones, también de mecánicu, cuando esa empresa taba jaciendo la carretera Llanes-Unquera, en los 60.
Tras la mili retomaría el oficiu de mecánicu en Celorio (con Ramón Gutiérrez) y en Quintana (en el taller MIFER), hasta que se incorporó al bancu.
Era un cobrador de buen corazón, y aguantaba todo lo que podía las letras hasta que sus deudores (pequeños comerciantes, en algún casu, como la respetada y apreciada viuda Pilar Pérez Bernot, la de la tienda La Pilarica) podían pagalas.
En 1969 Paulino se casó con Conchi Blanco Oves. Tienen 3 jiyos, Inmaculada, Marta y Paulino, y 3 nietos, Paula, Ana y Pablo (unu por cada jiyu).
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