Mis personajes favoritos (Nº 130).
Francisco (Los Callejos, 1964) tá en Méjico. É empresariu d’ hostelería y tien detrás una próspera y trabajada tradición de familiares dedicaos a esi sector. El primeru d’ ellos que abrió un hotel fue su tíu Manuel Balmori, que había marcháu p’ allá en los años 40 a trabajar en la tienda d’ abarrotes que poseía en Polanco su pariente Laureano Balmori. Manolo Balmori era una figura empresarial muy grande. Entre los hoteles que tenía, tantu en Méjico como en España, se contaba el Liabeny, en Madrid, frecuentáu por los llaniscos de pasu por allí.
Después d’ él destacó Amable Concha, el del Montemar, que se nos fue no jaz muchu. Todos de Los Callejos, una pequeña aldea digna d’ estudiu, que é una cantera empresarial de primer orden y una lanzadera d’ emprendedores, como se diz ahora, p’ al mundu.
A Francisco, cuyos padres, Alberto (Tin), ya fallecidu, y Joaquina (Quina) regentaban en Los Callejos el “Chispún”, un bar-tienda de los de toda la vida, i-tocó una adolescencia pareja’ l procesu de la transición política. De regresu a casa en el autocar de Mento desde’ l Institutu, oyó en la radio los tiros del teniente coronel Tejero en el Congreso. Pero eso enseguida quedó atrás. Él iría jaciéndose hombre al mismu tiempu que España se jacía más libre y más moderna.
Desde que cumplió los 14 años, trabajó seis veranos en el Don Paco. Después del Bachilleratu vino l’ Escuela de Turismu d’ Oviedo. Y después de la mili, a los 22, el trasladu a Méjico, onde empezaría a trabajar en el hotel Metropol con su tíu Amable y su pariente Benito Morán. Llegó allí pocu después del terremotu del 85, en el que perdió la vida su tíu Manolo (hermanu d’ Amable), que tenía el hotel Principado.
Francisco pasó a trabajar después en el hotel Jena (hoy hotel Ramada), del que é director general desde 2002. Jizo un master de general manager en la Universidad de Cornell (Ithaca, Nueva York) y en la su cabeza tá muy claru cómo ha de ser un hotel del siglu XXI.
Son siete los hermanos de Francisco (él é el sextu de los ocho jiyos de Tin y Quina): Mary, Fernanda, Alberto, Manolo, Mercedes, Aquilino y Ana, cinco de los cuales tan por Méjico.
Se casó en 2001 con Yolanda Álvarez, d’ Avilés, y el matrimoniu tien dos jiyos: Santiago y Francisco.
A Francisco, cuyos padres, Alberto (Tin), ya fallecidu, y Joaquina (Quina) regentaban en Los Callejos el “Chispún”, un bar-tienda de los de toda la vida, i-tocó una adolescencia pareja’ l procesu de la transición política. De regresu a casa en el autocar de Mento desde’ l Institutu, oyó en la radio los tiros del teniente coronel Tejero en el Congreso. Pero eso enseguida quedó atrás. Él iría jaciéndose hombre al mismu tiempu que España se jacía más libre y más moderna.
Desde que cumplió los 14 años, trabajó seis veranos en el Don Paco. Después del Bachilleratu vino l’ Escuela de Turismu d’ Oviedo. Y después de la mili, a los 22, el trasladu a Méjico, onde empezaría a trabajar en el hotel Metropol con su tíu Amable y su pariente Benito Morán. Llegó allí pocu después del terremotu del 85, en el que perdió la vida su tíu Manolo (hermanu d’ Amable), que tenía el hotel Principado.
Francisco pasó a trabajar después en el hotel Jena (hoy hotel Ramada), del que é director general desde 2002. Jizo un master de general manager en la Universidad de Cornell (Ithaca, Nueva York) y en la su cabeza tá muy claru cómo ha de ser un hotel del siglu XXI.
Son siete los hermanos de Francisco (él é el sextu de los ocho jiyos de Tin y Quina): Mary, Fernanda, Alberto, Manolo, Mercedes, Aquilino y Ana, cinco de los cuales tan por Méjico.
Se casó en 2001 con Yolanda Álvarez, d’ Avilés, y el matrimoniu tien dos jiyos: Santiago y Francisco.
1 comentario:
Semilla!
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