sábado, 30 de abril de 2016

CAROLINA Y PAMELA MARTÍNEZ GARCÍA, SERVICIALES A MÁS NO PODER


Mis personajes favoritos (Nº 162).

Estas dos mocinas se vuelven locas por echar una mano a los demás. Son serviciales como ellas solas. A más no poder. Carolina nació en Oviedo en 1980, y Pamela en Llanes, dos años después. 
Cada 15 días o así, cuando vien al Ayuntamientu desde Gijón un agente de la Policía Nacional a jacer los DNI, allí tán ellas siempre a su láu, como dos secretarias de lujo, ayudando-i a agilizar la tarea.
Son las últimas de seis hermanos, jiyos de Carmen García Gutiérrez, nacida en San Vicente de la Barquera y ya fallecida, y de Jesús Martínez Vicente, gallegu del Rosal (Pontevedra). La mayor é Rosana; luego va María Jesús; luego Remigio; después Mariano, y a continuación, ellas.
Hermana de su madre era Filo (Carolina), que tuvo una escuelina en la calle Mayor a finales de los años 50, a la que tuvimos la suerte d’ asistir mi hermanu Juan Pedro y yo. (Ya pusi por ahí en circulación una foto en la que aparecemos el grupu de críos y crías juntu a Filo y Carmen, delante del enceráu).
El güelu maternu de Carolina y Pamela era Remigio, de la familia de los Buzos. Iba a la mar y era muchu de San Roque, como lo son ellas también (l’ añu pasáu, por ciertu, se vistieron d’ aldeanas en la fiesta del santu peregrinu). Viven en La Portilla juntu a su hermanu Remigio, cocinan las dos y procuran no perder nada de la programación de la Casa Cultura (lo que más i-os-gusta é el teatru, y en especial las representaciones que se dan en veranu delante de la iglesia).
Siempre sonrientes, poniéndo-i buena cara a la vida, las vemos vender por la calle papeletas de lotería del Club Deportivu Llanes, de las fiestas del Cristo y de San Pedro de Pancar, de la Cofradía del Santu Entierru, de la Escuela de Voley 9 x 18 y de lo que se tercie.

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